El Día de la Cruz se celebra en El Salvador el tres de mayo, siendo esta fiesta el resultado de la fusión religiosa entre la celebración española de la Santa Cruz que tiene raíces en la conmemoración del hallazgo por Santa Elena de la Cruz de Cristo, en época del Emperador Constantino y el tributo indígena a la madre tierra y al dios Xipe Tótec.
Esta fiesta es una tradición religiosa y marca la llegada de la temporada lluviosa y el nacimiento de las flores y de los nuevos frutos en El Salvador.
La Celebración se inicia en la víspera del 3 de mayo, colocando una cruz de “palo de jiote” Esta es adornada con papel de “china”, recortando en forma de “toallas, cortinas, cadenas, churritos”, con fruta de la estación como mangos, jocotes, marañones, naranjas, cocos, aguacates y con flores de coyol.
El ritual de adorar la cruz se hace en la propia casa o en cada casa ajena que se visita: Se arrodilla uno y se persigna (hace la señal católica de la Cruz) y toma un fruto y se lo come.